Prohibido
El Qingming, literalmente día "del claro resplandor",
Los chinos acuden hoy, décimo quinto día posterior al equinoccio de
Se trata de un ritual ancestral con el que se celebra el despertar de la naturaleza y el inicio de la
Los visitantes de los cementerios portan hojas de sauce o las cuelgan en las
Pero en la China capitalista, convertida hoy en la tercera
Con 8 millones de fallecidos al año en el país más poblado del mundo, la muerte se ha convertido en un
En el sur del país, en Cantón, las sepulturas cuestan
Mientras que en Babaoshan, el
Por problemas de
Las críticas de los chinos por lo caro que les cuesta
Sólo la mortaja cuesta entre 118 y 146 dólares, cuando su coste real es de 30, mientras que las urnas funerarias se venden a 44 dólares, aunque su coste no supera los 12.
Las quejas han arreciado este año de crisis financiera hasta el punto de que el Ministerio de Asuntos Civiles tuvo que reconocer ayer que el de los servicios mortuorios es un "monopolio
Sin embargo, los precios de algunos
La
Una grúa se llevó un coche funerario con un cadáver dentro.
El conductor estacionó en zona de estacionamiento prohibido frente a la funeraria para buscar unos papeles, casi le da un infarto cuando salió a los pocos minutos y no halló el vehículo
El coche funerario fue remolcado por estar mal estacionado.
Una grúa municipal de Nueva York se llevó un coche funerario con un cadáver dentro y ahora su conductor le disputa a las autoridades la multa que le impusieron por mal aparcamiento en el centro de Manhattan, detalló el diario Daily News en su edición digital.
El conductor y director de la funeraria responsable del incidente, Paul DeNigris, explicó que estacionó en zona de aparcamiento prohibido frente a su establecimiento porque necesitaba recoger unos papeles, pero cuando salió unos minutos después su coche había desaparecido y a él casi le dio un infarto.
DeNigris, explicó el diario, se disponía a trasladar un ataúd en su furgoneta hasta el aeropuerto de Newark (Nueva Jersey), desde donde se debía trasladarlo a Miami para ser incinerado.
La Policía de Nueva York aseguró, sin embargo, que el vehículo y su ocupante no estuvieron en esa zona restringida unos minutos, como asegura el director de la funeraria, sino más de tres horas.
La grúa municipal trasladó la furgoneta mal aparcada hasta el depósito, y allí se quedó el auto durante más de 90 minutos, sin que nadie reparara en que en su interior había un féretro, ya que llevaba cristales tintados en negro, explicó el conductor al diario neoyorquino.
Como deferencia al conductor tras el incidente y por el susto que se llevó el hombre, la grúa municipal decidió no cobrarle la tasa habitual de 185 dólares que normalmente se paga para recuperar el vehículo, informó el diario.
El jefe adjunto de la Policía neoyorquina, Paul Browne, señaló que, cuando los agentes encontraron el vehículo y llamaron a la grúa, "no había nada que indicara que era algo más que un simple carro aparcado ilegalmente".
DeNigris, por su parte, admitió que en el parabrisas llevaba un letrero que identificaba el vehículo funerario, pero que se le cayó, y ahora afirma que, tras la experiencia, pondrá nuevas identificaciones en la parte trasera y en los laterales.
Ahora el despistado conductor, según el diario, disputará a las autoridades neoyorquinas la multa de aparcamiento de 115 dólares que le impusieron, pues considera que los vehículos funerarias no deberían de estar sujetos a la misma regulación que los turismos normales.